el sueño de crear un hogar...
La gestión inmobiliaria se ha forjado tras los años para ofrecer al cliente un servicio específico, donde se cruzan diferentes intereses que provienen de la misma gestión: los intereses del cliente comprador y los intereses del cliente vendedor.
La gestión de venta es el reclamo que toda agencia inmobiliaria utiliza para atraer a los clientes que desean adquirir un inmueble, sin embargo, resulta más gratificante trabajar al revés. Es decir, conocer bien los intereses del cliente comprador y partir desde este punto para localizar el inmueble que desea.
Descubra a nuestro equipo de profesionales siempre con una disponibilidad personalizada. Para nosotros, será también un placer conocerle. Consulte los inmuebles que tenemos a su disposición concertando una cita en nuestras oficinas.
Financiar un inmueble
Nos encontramos ante un mercado financiero que por sí mismo crece en competitividad tratando de adaptarse a los valores que, el índice de referencia Euribor sigue manteniendo con repuntes negativos. Frente a estas expectativas que el Banco Central Europeo parece que defenderá durante los próximos años, la estrategia de las entidades financieras será la de diseñar progresivamente sus productos para aprovechar la máxima rentabilidad posible de ellos hasta que se desintegren. Durante los próximos meses nos situaremos en escenarios antes desconocidos para nuestra banca, donde deberá premiar la agresividad comercial para captar clientes, quedando lejos la estructura de banca tradicional que hemos mantenido durante años (ver más).
Comprar una vivienda
Comprar una vivienda siempre está sujeto a cumplir unas obligaciones de pago que surgen en su proceso, gastos que deben tenerse en cuenta antes de iniciar la búsqueda de la que podría ser nuestra casa. Hay que saber en cuánto se encarece el precio para determinar cual será la horquilla de precio a la que estamos dispuestos a ejercer la compra. En Andalucía aún contamos con la reducción o bonificación de los impuestos de transmisiones patrimoniales (ITP) para la compraventa de vivienda habitual, dirigido a jóvenes menores de 35 años y debiéndose tener en cuenta que, tanto la compraventa como la hipoteca, no debe superar los 130.000€, esto puede llegar a suponer un ahorro de hasta 8.000 euros (ver más). Consultar reducciones para grados de minusvaslía igual o superior al 33%.
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